La llegada de Marzo supone que ya no podremos encontrar en los mercados,
una serie de verduras como son la alcachofa, que es típica de los meses más fríos del año;
el apio, una hortaliza de fuerte sabor; la escarola, con su
característico equilibrio entre dulzor y amargor, perfecto para
ensaladas; o la col lombarda, rica en ácido fólico, fibra y vitaminas.
Pero
en las próximas fechas aparecerán las primeras patatas nuevas.
Son de piel dorada y fina y con menos calorías que la patata vieja,
además de tener un sabor más neutro. Son siempre muy apreciadas en las
cocinas.
A finales de marzo se podrán encontrar también los primeros espárragos blancos de Navarra. Sus propiedades nutricionales son excelentes y
se puede preparar de muy diferentes maneras: cocidos con mayonesa, al
horno, a la plancha, en un revuelto con huevo, jamón serrano o chorizo…
La calabaza también reaparecerá en nuestras cocinas en las próximas semanas. Rica en vitamina A, la calabaza se puede conservar durante semanas e incluso meses en un lugar fresco y seco.
Por último, hay que prestar atención también durante este mes a los
ajetes tiernos, un ingrediente que siempre da mucho sabor a cualquier
receta; y a la achicoria roja, que se encontrará en un momento excelente y que combina muy bien con otras verduras en ensalada.